domingo, 24 de noviembre de 2013

Por qué ver "Parks and Recreation" me hace feliz


Puede hacer un año y pico que leí cierta entrada en un blog. Hablaba de las bondades de una serie llamada "Parks and Recreation". Ya me sonaba el título pero no sabía mucho sobre ella más allá de:
  1. A todo aquel que le gustara 30 Rock le gustaba Parks.
  2. La serie la protagonizaba Amy Poehler, amiguísima de Tina Fey (30 Rock).
  3. Mi hermano me la recomendaba (Fue el que me descubrió 30 Rock).
  4. En el blog anterior la ponían a la altura de Community.
Y por si no lo sabéis, profeso absoluta devoción por 30 Rock y Community. De modo que las posibilidades de que me gustara esta comedia eran muy altas. Tardé mucho en ponerme con ella (sobre todo porque las primeras temporadas no eran del todo accesibles online) pero cuando lo hice, supe que no me había equivocado. La primera temporada (brevísima además) no hace justicia a la serie. Realmente, sólo Leslie, la protagonista, tiene una personalidad atractiva. Los secundarios no parecen encajar. Pero a partir de la segunda temporada sucede la magia y todo el reparto se vuelve absolutamente imprescindible.

El argumento es el siguiente: departamento de parques de una pequeña ciudad americana llamada Pawnee. Allí trabaja Leslie Knope, una mujer optimista, adicta al trabajo y fiel a sus amigos. El colmo de la hiperactividad y el buen hacer, irónicamente rodeada de una panda de vagos que ni comprenden ni comparten su pasión pero la adoran igualmente.

Sabiendo esto ya puedo proceder a citar los 10 motivos por los que ver Parks and Recreation me hace feliz:
1. Es una comedia. Y es que tengo debilidad por este género cuando las cosas se hacen bien. Obviamente sería un poco difícil que un drama me diera ganas de vivir tras cada capítulo. Parks and Rec es una comedia grabada en formato Mockumentary (falso documental), rasgo determinante ya que muchos de sus mejores momentos están basados en las confidencias de los personajes ante la cámara (o las impagables caras de Tom).

2. Leslie Knope. Cualquiera podría pensar que un protagonista hiperactivo, trabajador y responsable  es sinónimo de aburrimiento extremo, pero aquí no. Leslie es un personaje que da energía. Y pese a tantísimos rasgos positivos, es un personaje redondo. Sí, tiene una fé ciega en sus amigos, adora su trabajo, derrocha optimismo... pero también es competitiva, cabezota, soñadora y un poco gafe. Y da igual lo que le suceda porque Amy Poehler se come la pantalla cada vez que aparece.

3. La química. En las series de televisión es sencillísimo toparse con un reparto en el que los personajes son amigos simplemente porque así lo pone en el guión. Afortunadamente, en Parks no sucede eso. Nos encontramos con un cast numeroso que a partir de la primera temporada queda consolidado como una verdadera familia. Los guionistas se toman muy en serio la necesidad de explorar todas las relaciones haciendo que cada personaje comparta momentos con todos los demás. Y esto se agradece porque como espectador sabes qué esperar de las distintas interacciones y sientes que conoces a los personajes. 


4. La amistad. Personificada en la tierna relación entre Leslie y Ann. No recuerdo haberme creído tanto una amistad desde Friends. La relación que entabla nuestra protagonista con la enfermera que en el capítulo piloto le planta cara y da pie a todo el escándalo del foso es verdaderamente enternecedora. Y son impagables cada uno de los cumplidos que Leslie dedica a Ann. En una variante de amistad a amor, es imposible no adorar a la pareja más especial de la serie: April y Andy.


5. La cabecera. Es bien sabido que hay series con cabeceras odiables. Larguísimas, aburridas, con una música insufrible... y otras son pequeñas obras de arte. La de Parks no es ni lo uno ni lo otro. Pero me hace feliz ¿Por qué? Una melodía tan optimista como su protagonista, la breve introducción de los personajes y la cara de Tom. Y además cortita, como a mí me gustan. 

6.  Pawnee. No sé si será por el entusiasmo de Leslie, por los numerosos exteriores usados en la serie, por sus personalidades locales, sus fiestas o Little Sebastian... pero resulta imposible ver esta comedia y no acabar pensando en la ciudad de Pawnee como un lugar real. La cultura, mitología y valores de la ciudad están tan presentes en los capítulos que es imposible no pararse a valorarlo. Me gusta Pawnee, ¡Me encantaría visitar sus parques y pensar que hay alguien en el ayuntamiento que se preocupa por lo que le pasa a sus vecinos! Así es Leslie y así es Parks and Recreation. Te lo crees y te gusta. Y si fuera real, ya se habría convertido en lugar de peregrinación.


7. La burocracia puede ser divertida. Sabes que una comedia es buena cuando los pequeños quebraderos de cabeza que le suceden a un departamento de parques de una ciudad de Indiana, son argumento suficiente para que una decena de personajes actúe y se vea afectado de distintas maneras.

8. El reparto. Aquí influye mucho el punto 3.  Sí, queda claro que para mí la imprescindible y eterna favorita es Leslie. Pero el conjunto de personajes que la rodean es tan bueno. Tan, tan bueno que llega un momento en la serie en el que no podrías desprenderte de ningún secundario porque todos tienen algo bueno que aportar. Ron, un esencial a la altura de Leslie, Ann, la eterna consejera, Tom, Donna, April, Andy, Jerry, Chris, Ben... Ninguno sobra (Miento, Mark en la temporada 1).


9. El tono. Parks and Recreation tiene algo verdaderamente sorprendente y es que hace comedia a partir de las cosas buenas. Tiene como motor a un personaje optimista que sólo quiere hacer, hacer, hacer... No es como tantas otras sitcoms en las que el reparto sólo se dedica a meter la pata, enfadarse y quejarse. En Parks el humor viene de la acción, de los intereses de los personajes, de las ganas de arreglar cosas... No hay conflictos serios, hay enredos. Y esta forma de tratar las tramas se traduce en una sonrisa de oreja a oreja en el espectador. Además no es artificiosa, no necesita mil invitados de renombre (30 Rock), o el más surrealista de los argumentos (Community) para hacer que cualquier simpleza funcione. Y ya sabéis que me encantan las posibilidades creativas de series como 30 Rock o Community, pero me parece que lo que esta comedia consigue es digno de mención.

y 10. Porque da igual el capítulo o la temporada. No falla. Cuando llega el momento de los créditos yo tengo una sonrisa de satisfacción que ni la mismísima Leslie Knope. Es una serie que te deja con buen sabor de boca no matter what

P.D: ¡Me he olvidado un detalle esencial por el que me encanta esta serie! Amo los parques. Un parque cuidado me da la vida, y en esta comedia, al menos un personaje los admira tanto como yo.

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