jueves, 23 de abril de 2009

La película perfecta

Primero de todo: no, no voy a hablar de la película perfecta. De hecho, no creo que fuera posible elegir una a la que calificar de esa manera (aunque con Déjame Entrar sería fácil) En esta entrada lo que pretendo es escribir acerca de los diversos elementos que contribuyen a que una película me encante. Me vino esta idea a la mente después de que Joaquín me explicara sus influencias a la hora de hacer cine.


Empezaré por los actores:

Creo que en la mayoría de los casos prefiero en el papel protagonista a personajes femeninos, me gusta que aparezcan mujeres con carácter como Julianne Moore (Blindness), Juno, Amélie o Cybil (Silent Hill) Si por el contrario el prota es un hombre, me niego en rotundo al típico héroe de película de acción ... prefiero a un tipo patoso, dulce, simpático, que roce lo neurótico (Edward Norton en el Club de la Lucha o Johnny Depp en la Ventana secreta) o al típico perdedor, véase: reparto completo de Little Miss Sunshine, Mark de Rent o el poli de Magnolia. Pese a lo que acabo de comentar acerca de personajes masculinos, he de decir que Woody Allen no me hace mucha gracia. Y recientemente he caído en la cuenta de que me gustan los personajes de niños pequeños ... siempre y cuando su papel sea convincente e imprescindible para la historia. Destacando especialmente Eli y Oskar (Déjame Entrar) Olive (Little Miss Sunshine) o los hermanos Baudelaire (Una serie de catastróficas desdichas)


En una película me gusta que el protagonismo esté repartido. Si es un grupo grande mejor que mejor, en la variedad está el gusto (Blindness, Magnolia, The Mist, Pequeña Miss Sunshine, Rent) Si encima somos testigos de cómo se conocen los personajes en cuestión, yo soy inmensamente feliz. Es divertido ver cómo se desarrolla la
relación entre individuos desconocidos (Rose y Cybil en Silent Hill, Evey y V en V de Vendetta, Eli y Oskar en Déjame Entrar)

En películas de terror:

Prohibidos los monstruos patéticos. Para mí "el bicho" perfecto es aquel que se deja ver. No me mareéis con ése que se esconde bajo el agua y sólo sale para darte dos sustos . Buenos monstruos son los de Silent Hill, The Mist o The Host, que a parte de tener un diseño curioso aparecen "a lo grande", dando tiempo al espectador a observar detalladamente. El mejor ejemplo de lo que estoy hablando es la escena de presentación del monstruo de The Host:




Algo que no me gusta en las películas de terror es ... la sangre falsa o lo que es lo mismo ... el gore. No me acaba de convencer la exageración de ése género. No, definitivamente no me gusta el exceso de sangre ... aunque siempre hay excepciones ¿No? Y como muestra, Sweeney Todd. Y hablando de Sweeney, otro detalle que me gusta en el terror es que pueda incluír algo de humor, siempre y cuando no resulte ridículo (Sweeney, The Mist)

Pero volviendo a los elementos que me gustan: los vampiros. Dentro de los bichejos propios de la mitología de terror son mis preferidos. Los hombres lobo nunca me han hecho gracia, y tampoco los clásicos zombies. Donde se ponga un vampiro, monstruo, espíritu o asesino, que se quiten los peludos lobunos y los muertos vivientes.


Temática:

A parte de lo terrorífico, he llegado a la conclusión de que me gustan las historias ambientadas en algún tipo de distopía. Buenos ejemplos son: La Isla, Blindness, Matrix o V de Vendetta. Me gustan las historias con saltos en el tiempo (El efecto Mariposa, El Club de la lucha) las que incluyen elementos surrealistas (Big Fish, Camino, El verano de Kikujiro, Magnolia) Y aquellas que te cuentan la vida de personajes aparentemente independientes para después enlazarlas (Magnolia, Las Horas)




Amo los argumentos cautivadores. Esos que con sólo leértelos ya te ponen en tensión. Son los de esas películas en las que sabes que desde el primer minuto va a haber acción. Ejemplos:


Blindness: toda la sociedad se queda ciega debido a una extraña epidemia salvo la mujer de un médico que será la única testigo del terror y desesperanza que se vive en un mundo en el que nadie excepto ella puede ver.

Mentes en blanco: Cinco hombres se despiertan encerrados en un almacén sin que ninguno de ellos recuerde cómo llegaron allí ni quiénes son. No tardarán en darse cuenta de que han participado en un secuestro, sin saber si son secuestrados o secuestradores.

Última llamada: Stu Shepard, un asesor de publicidad de medio pelo, descuelga el teléfono de una cabina de la ciudad de Nueva York. Pronto se ve a sí mismo preso de un tortuoso juego. Si se le ocurre colgar, le dice el interlocutor, Stu será hombre muerto.

Slumdog Millionaire: Jamal, un pobre habitante de Bombay se presenta al concurso "¿Quién quiere ser millonario?" y para sorpresa de todos responde correctamente a cada una de las preguntas. La policía duda de su capacidad y decide llevárselo para interrogarlo. Jamal deberá explicar el por qué conoce cada una de las respuestas y para ello se remonta a su pasado.

¿Qué? ¿Son o no argumentos intrigantes? Son este tipo de historias las que más me llaman la atención. Hay historias con inicios interesantes y similares a estas, como es el caso de la primera entrega de Saw pero precisamente estas cuatro figuran en la lista de películas que yo recomendaría.


Más:


Acerca de estética no tengo
nada claro, pero puedo señalar elementos de películas que me gustaron, por ejemplo: me encanta el colorido de Amèlie, Juno o Big Fish (o esos geniales pasillos del Resplandor) Por ello admiro largometrajes con tantos efectos visuales como los de Sin City, cada escena es un derroche de efectos especiales y personajes llamativos. Prefiero los exteriores a los interiores. Si la acción se desarrolla al aire libre generalmente los planos son más grandes y eso me gusta (300, El verano de Kikujiro, Slumdog Millionaire, Little Miss Sunshine)


(Amèlie lanzando piedras al río)


Detesto las carreras de coches y persecuciones aceleradas, me resultan monótonas y repetitivas. Las secuencias de explosiones, disparos contínuos y escapadas de los héroes me dejan fría por regla general. Sirve como excepción a esto V de Vendetta, que me encanta de principio a fin o la genial Matrix. Adoro los ambientes y decorados cuidados, aquellos tan detallistas que tienen su propio documental en el making off del dvd (Silent Hill, Big Fish) Siempre he dicho que yo me cogería una bicicleta y me daría un paseíto por la ciudad en la que se rodó Silent Hill xD Y, aunque pudiera parecer lo contrario, me gustan las secuencias de peleas. Siempre y cuando sean innovadoras, originales, me gusta que se puedan apreciar los movimientos y sobre todo, que no acabes hasta las narices de tanto puñetazo. Es por esto que me gusta tanto 300, las batallas son apasionantes. Otro ejemplo sería El club de la lucha, Matrix (babaaas!!) o la tan comentada V de Vendetta aunque en esta no abundan tanto las peleíllas.



Probablemente podría seguir escribiendo en esta entrada pero no quiero que quede excesivamente larga, así que freno y lo doy por zanjado. Como habréis podido detectar, he repetido continuamente títulos de películas, pero tiene sentido ¿no? El caso era escribir de las cosas que hacen que una película me guste, y esas que tanto nombro son un buen ejemplo.


1 comentario:

UrothJRazail dijo...

Yo en general prefiero a protagonistas masculinos, pero que como tú dices, se salgan del héroe de acción. Si hay que poner a un personaje así, hay que saber llevarlo bien, para que no desespere por su perfección.

A mi también me gusta que los personajes se conozcan en la película, es interesante ver como se desarrollan las relaciones. Y a ser posible, que se parta de cero en lo que pasados/orígenes se refiere (lo que los frikis comiqueros llamamos un "Año Uno")

De acuerdo en todo lo referente a películas de terror, añadiendo que odio los sustos innecesarios. Puedes crear mucha tensión con escenas inquietantes, pero sin recurrir al sobresalto fácil (como en Silent Hill, por ejemplo, o en Alien). A veces, saber que hay algo acechando crea más tensión que estar tan tranquilo y que el monstruo/asesino salga de repente.

Respecto a los vampiros, adoro que se explote en una película todos los aspectos de ese típico personaje: el lado monstruoso, salvaje, el lado sensual, y el lado trágico y desesperante de la inmortalidad.

En temática, acepto cualquier cosa mientras sea algo original, bien llevado. En especial, adoro los finales sorprendentes.

Me encantan las películas de coloridad extrema: o muy coloridad y alegres, como un cuento de fantasía (Big Fish o Amelie) o totalmente oscuras y tétricas (como Sweeney Todd o Batman)

Me gustan las peleas cortas e impactantes, y lo mismo de las persecuciones, que pecan siempre de ser demasiado largas.

Y adoro que en una película se trate de hacer todo lo más realista posible. Sorprenden los documentales del "Como se hizo" de "El Caballero Oscuro" por ejemplo, y ver que prácticamente todas las escenas fueron rodadas tal cuál, sin apenas efectos especiales generados por ordenador (el hospital explotando, los SWAT cayendo colgados por la fachada de un edificio en obras, Christian Bale de pie en lo alto de las cornisas de las torres de Hong-Kong... no tienen truco, son de verdad)